La ley de aborto que se está tramitando contempla en la práctica el aborto libre hasta el final lo que conlleva un mayor índice de supervivientes. Right to Life: "¿Por qué se opone a esta enmienda que proporciona cuidado sanitario a una bebé que ha sobrevivido al horror de un aborto de gestación avanzada?"

Jacinda Arden, primer ministra de nueva Zelanda, se ha sumado a otros 80 legisladores que han rechazado con su voto una propuesta para que se de a los bebés que sobreviven a un intento de aborto los cuidados necesarios para sacarlos adelante.

El parlamentario Simon O’Connor presentó una enmienda sobre el cuidado del niño después del aborto que salió rechazada por 37 votos contra 80.

La propuesta de O’Connor pretendía establecer la obligación para cualquier personal sanitario de atender adecuadamente al bebé que, pese a ser objeto de un aborto, sobreviviera a las técnicas destinadas a acabar con su vida antes del nacimiento.

Esta enmienda es relevante en la medida en que el proyecto de ley de aborto de Nueva Zelanda que se está tramitando contempla en la práctica el aborto libre hasta el nacimiento lo que conlleva un mayor índice de supervivientes del aborto.

La organización provida Rigth to Life asegura que «es muy perturbador que nuestra primer ministra, el ministro de de Justicia y la mayoría de su gobierno hayan tomado la decisión de votar en contra de esta importante enmienda. Uno podría esperar que cualquier persona humana haga llegar al menos este cuidado esencial a un niño que ha sobrevivido a un intento de ser asesinado».

La decisión de rechazar esta enmienda ignora tres verdades incontrovertibles como son que el no nacido es un ser humano; que el niño tiene el derecho a la vida y necesita ser respetado y protegido y que los médicos tienen el deber de proteger la vida y no de destruirla.