Comparte esta maravillosa historia de amor

Los protagonistas de esta historia son Wolf Gottschalk , de 83 años , y su esposa Anita, de 81 años. Desde el año 1954 están casados y hasta hace más o menos 8 meses habían compartido el mismo techo cada día que pasaba. Fruto de este matrimonio nacieron un chico y 2 chicas; todos ellos formaban una familia idílica.

Ahora tienen nietos y sin duda la más especial es Ashley. Esta joven publicó en las redes sociales la tristeza que sentían ambos. ¿El motivo? Tuvieron que separarse por la falta de medios físicos en una residencia. Wolf y Anita tuvieron que ingresar en 2 centros para mayores diferentes por lo que la pena les inundó el alma.

Toda la familia está haciendo un gran esfuerzo por conseguir que se vean prácticamente a diario pero aún así es muy duro para todos. La lista de espera para que puedan compartir espacio es muy larga por lo que no se puede hacer nada de momento. Wolf , además, está delicado de salud. Le acaban de detectar un linfoma y tiene problemas cardiacos. Para colmo, la demencia está comenzando a apoderarse de su memoria.

En el seno de la familia están tranquilos porque aún sabe quién es Anita pero se muestran muy tristes por ver que no podrán compartir los últimos meses, quizás años, de su vida con la persona con la que había vivido toda su vida durante los últimos 62 años. Ante esta situación, la pareja siempre acaba llorando sabiendo que el final de uno de los dos está cerca, más aún a sabiendas de lo duro que está suponiendo esta forma de vivir tan separados el uno del otro.