La sexualidad es una parte muy importante de la vida. De hecho, la Organización Mundial de la Salud (OMS) define la salud sexual como el "estado de bienestar físico, emocional, mental y social relacionado con la sexualidad”. En este sentido, no tiene que ver sólo con la reproducción, sino también con el placer y la intimidad, ya que influye directamente en la calidad de vida de las personas.

Nuestra sociedad es cada vez más abierta y comunicativa y nos cuesta menos hablar con naturalidad de temas íntimos que hace solo unos años habría sido impensable por las tabús que existían sobre todo en cualquier tema relacionado con la sexualidad.

Uno de los temas que a las mujeres que lo padecen les cuesta mucho reconocer y expresar, es la falta de deseo sexual. Los problemas sexuales son mucho más frecuentes de lo que pensamos y se estima que entre el 40 y el 50% de las mujeres los ha sufrido independientemente de su edad. La falta de deseo y/o excitación es una de las disfunciones más comunes y aunque tiene tratamiento, solo un tercio de las mujeres que lo padecen consultan con su médico.

Lo ideal sería que todas las mujeres que se encuentren ante estos problemas se animaran a consultar con un médico lo antes posible, pues la falta de apetito sexual y la ausencia de excitación pueden tener muchas causas y la mayoría de ellas son evitables.

¿Que entendemos por bajo deseo sexual?

Puede que no siempre coincidas con tener ganas de practicar sexo con tu pareja o que te apetezca menos a menudo que a el, pero esto no son razones para pensar que tienes algún problema, simplemente cada persona tiene unas necesidades distintas.

Pero si es muy habitual que esto suceda y se convierte en algo frustrante y molesto, estas tres pistas pueden indicarte que si hay una disfunción respecto al deseo sexual:

-No sientes interés en ninguna actividad sexual, ni siquiera en la autoestimulación.

-Nunca tienes pensamientos sexuales o fantasías.

-Sientes frustración y decepción por esta ausencia de deseo.

¿Por que hay poco deseo sexual?

La falta de deseo sexual puede estar relacionada con aspectos fisiológicos, psicológicos, influencias socioculturales y relaciones interpersonales. Suele ser más común en mujeres adultas posmenopáusicas, pero también puede afectar a mujeres jóvenes. En este sentido, es importante eliminar ciertos mitos, como que con la edad tiende a disminuir la actividad sexual. Según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), el 80% de las mujeres de hasta 65 años realizan prácticas sexuales habitualmente.

En general, hay muchas explicaciones para un descenso del deseo sexual, estas son algunas de las más comunes:

-El uso de ciertos medicamentos, como los anticonceptivos orales o la quimioterapia. En este caso, es necesario consultar con un médico para buscar alternativas o tratamientos adicionales.

-Algunas enfermedades, como la diabetes o la hipertensión.

-Molestias a la hora de tener relaciones por sequedad y dolor en la zona genital, es recomendable usar lubricantes e hidratantes o fisioterapia de los músculos de la pelvis.

-El estrés o la depresión. Se recomienda consultar con un médico la necesidad de hacer terapia psicológica o recibir un tratamiento.

-El embarazo, el postparto y cuando se está dando el pecho.

-La menopausia.

-La baja autoestima.

Consejos para recuperar el deseo sexual

En primer lugar, es necesario conocer el motivo de la falta de libido para buscar una solución adaptada. Para ello, es recomendable consultar con un especialista en salud sexual, que valorará todas las causas, tanto las más evidentes como las menos, para ofrecer un tratamiento personalizado.

Algunas recomendaciones para aumentar el deseo sexual:

-Reducir el estrés y evitar la fatiga.

-Mejorar la comunicación con tu pareja. Hablar de las necesidades, inseguridades y preferencias de cada uno puede ser de gran ayuda.

-Mejorar la calidad de tus relaciones sexuales. Las experiencias placenteras mejoran el deseo y perspectivas de los encuentros sexuales posteriores. Por eso, será beneficioso que dediques tiempo a los preliminares, busques aquello que te estimule más y te haga disfrutar.

-Consultar con un profesional sanitario la posibilidad de tomar medicamentos.

-Tomar complementos alimenticios para mejorar la falta de deseo sexual.

Si sientes un bajo deseo sexual, habla con tu ginecólogo. Con su ayuda y estos consejos, podrás volver a disfrutar de una vida sexual plena.